miércoles, 30 de noviembre de 2011

Poco a poco...

Aunque vivimos en un mundo en el cual las posibilidades de cada uno se ven multiplicadas por los aportes técnicos, aún hay cosas que tienen que hacerse como "antes". Es el caso de algunas pegatinas, en las cuales el nivel de detalle, o el texto en pequeño, hace imposible recurrir al vinilo. Desde luego todo esto se acabaría en el momento en que apareciera una buena impresora con tinta blanca, dorada y plateada. De hecho existen las Mimaki y las Epson con esas posibilidades, pero no bajan de los 10.000 $


En ese caso siempre nos queda la serigrafía! Para mi, con mis pocos medios, ha sido un largo proceso el de poder "casar" tres tintas, Aún no es perfecto el resultado, pero es la primera intentona, para llegar aquí he pasado por muchas cosas,  como hacer un fotolito, como preparar la pantalla, como insolar, intentar un offset casero,  probar con tinta al agua (No lo conseguí), encontrar el soporte adecuado, como hacer para que no se corra la tinta... Es un oficio, en definitiva, pero no quiero exteriorizar mi trabajo.





Crece la competencia, incluso en un campo tan escaso como el de las pegatinas de bicicletas antiguas. La gente que viene pisando fuerte tiene quizás mas medios... Hay que esforzarse aún mas!

3 comentarios:

Jofegaber dijo...

Pues deberias exteriorizarla, Reciclone.

Los grandes maestros se diferencian del resto en estas cosas...

- Su humildad
- Su capacidad de aprendizaje
- Su capacidad de entrega.

Cumples con muchos valores más, así que nunca dejes de lucharlo.

Un abrazo

ininbita dijo...

Restaurar cosas antiguas no sólo requiere intervenir sobre esas mismas cosas. A menudo obliga a rescatar los "procesos antiguos".

A modo de metáfora:

Este camino de explorador es bien tuyo, a machete y sudor te has adentrado en la espesura de la selva. No te detengas, no mires atrás ni pidas ayuda a poderes ilusorios. Persiste, pues con Fe encontrarás las Fuentes. Pero no bebas de sus aguas ni te aproximes demasiado cuando llegues allí. Imprégnate de Ellas desde "la distancia prudente", y luego vuelve tus pasos camino a casa por el sendero que marcaste con tu machete y tu sudor.
No te preocupes por ellos, aquellos que cómodamente te siguen no ven más allá de tí. Cuando vuelvas quedaran perdidos en la espesura sin saber donde estan ni qué hacer. Nunca, aunque te pisaran los talones, llegarán a dónde tu fuiste.

David Castillo dijo...

Reciclone, yo creo que siempre sera mejor que lo encargues a gente con más medios y tu te centres en otras cosas que faena no te falta y vales mucho con el pincel.

Lo de ininbita es muy fuerte. ¿De donde ha salido esa metáfora? si es tuya y no es un corta y pega, FELICIDADES. El último párrafo es guapísimo.